Como es costumbre al finalizar una temporada, siempre nos sorprende lo que el juego le hace a los participantes físicamente, más allá de las jugadas estratégicas y los conflictos personales.
En Survivor: San Juan del Sur, donde los participantes permanecieron durante 38 días a la intemperie, casi sin comer y sin bañarse, pudimos notar como esto causó estragos en su apariencia: rostros cansados, pérdida de peso e incluso fracturas.
Por eso quisimos ver mejor cuán drástico para algunos fue el cambio en esta temporada:
Reed
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